En la edición del domingo 26 de mayo, el periódico el Tiempo de Bogotá contenía un artículo muy vistoso que daba cuenta de un proyecto que viene desarrollando el Ministerio del Interior sobre leyes inútiles, un trabajo interesante como historia del derecho, pero no para el bombo que se le pretende dar como idea innovadora. Veamos un ejemplo: la periodista enuncia que se pretende depurar el sistema para promulgar una ley que si se produce, haría honor el epígrafe, pues sería la más inútil de las inútiles... Si se tiene en cuenta que la periodista escribe que saldrán del ordenamiento las leyes derogadas, eso no necesita de una ley. Derogar significa terminar la existencia de una ley. Luego tendrían que hacer un código para derogar las millones de leyes derogadas desde hace dos siglos. ¿Sería esto un lapsus de la periodista o el proyecto contempla algo tan antijurídico?
Por otra parte detengámonos en lo que los estudiosos del proyecto consideran "inútiles": Una ley del siglo pasado que ordenaba al dueño de un predio limpiar los caminos de herradura. Claro, para un citadino que no sabe el significado de camino de herradura eso es excéntrico, pero ocurre que Colombia es rural en un porcentaje muy alto, y si señores doctores, hay caminos de herradura y hay que limpiarlos, para que los arrieros se transporten; para que las mercancías y alimentos lleguen a sus destinatarios; para que esa comunicación ancestral que no se conoce en las ciudades mantenga la vida de la otra gente. De aquella que nunca ha sido objeto ni lo será en la exquisita importancia que el centralismo capitalino le ha otorgado a gran parte del país, es decir, al olvido de siempre.
Y hay que limpiarlos, viceministro Samper, para saber al menos que los que existen debieron ser remplazados por caminos más funcionales que mejoraran la calidad de vida de la gente. Ojalá se cumpliera la ley, para pensar en País hay que conocerlo, yo reconozco que me falta mucho, pero al menos sé que existe selva, existe campo, existe zona rural, existe el amigo campo que debería ser Nuestro Tesoro. Amigos ¿no creen que se invertiría mejor el recurso público si los doctores contratados por el Ministerio del Interior estudiaran las leyes de los últimos diez años y corrigieran los errores, eso si, algunos muy graves?
Genial! Gracias pro compartir este interesante análisis
ResponderEliminarExcelente análisis doctora y pienso que con esto se abren varios debates como la importancia de los medios de comunicación en el ámbito jurídico y la información o desinformación de los mismos, la derogatoria tácita y expresa de la ley, gracias por compartir este análisis.
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